Y de cómo
esa duda puede estar causada por miedo a clasificaciones morales.
Al menos eso
es lo que el director parece decir a lo largo del relato respecto a alguno de
sus protagonistas, y lo que determina que el conflicto tenga un desenlace
inesperado.
Se trata de
una película histórica en torno a
una acción terrorista en el año 1976: secuestro
del vuelo 139 de Air France en su ruta desde Tel Aviv, con escala en Atenas
y de camino a París, con 248 pasajeros más la tripulación. El vuelo fue desviado
a Entebbe, Uganda, donde recibieron refugio y apoyo militar del dictador
africano Idi Amín Dada.
Perpetrado
por dos militantes de las Células Revolucionarias alemanas y dos del Frente
Popular para la Liberación de Palestina, con la amenaza de matar a los rehenes
si no se cumplían sus exigencias de
liberación de presos. Poco después del aterrizaje todos los pasajeros no judíos fueron liberados.
Este hecho apuntala la duda del secuestrador
alemán, al que repugna que lo asocien con el movimiento nazi, y lo paraliza
en la toma de decisiones.
La reacción
del gobierno de Israel se muestra en simultaneidad con el secuestro. Y de cómo
también se percibe la contradicción de
criterios y la duda entre sus dirigentes:
Isaac Rabín, primer ministro, más partidario del diálogo y la negociación, y Shimon
Peres ministro de defensa, más partidario de una intervención armada.
La misión de
rescate de rehenes fue llevada a cabo por las Fuerzas de Defensa de Israel
(FDI).
Este es el
eje del relato.
Antes de ver
la película me he documentado acerca del hecho histórico y he estado pendiente
del rigor, o no, con que se trataba. Y sí, el
guión responde fielmente al desarrollo de los hechos.
Como lenguaje cinematográfico la película no aporta nada destacable, es
plana de principio a fin a pesar de que utiliza muchos recursos técnicos y
todo tipo de planos; yo diría que algunos los mantiene demasiado, aportando una
cierta sensación de lentitud y de
demora a lo que ayuda el abuso de diálogos.
Vestuario
adecuado al momento. La banda sonora se intensifica para reforzar las
situaciones más críticas pero nada a destacar.
Para
entender la actitud de los secuestradores se recurre al flashback (secuencias referidas a un tiempo pasado) aunque creo que
se ha insertado arbitrariamente a lo largo del relato creando la sensación de
repetición y confusión.
El trabajo actoral encorsetado, muy
ceñido a los tópicos de la temática. Les falta espontaneidad, pasión,
credibilidad… Creo que la dirección no ha sabido infundirles confianza para proyectar más
de sí
mismos. Parecen actuar bajo la presión de un cliché. Y eso mismo se ve en los
extras, que parecen estar en la sala de un aeropuerto a la espera de un avión
con retraso y no como sujetos víctimas
de un secuestro.
Las localizaciones están impuestas por el hecho histórico: Israel,
Alemania, Libia, Nigeria, interior de un avión, despachos de los dirigentes
políticos, aeropuertos, interior de casas, paisajes… Yo diría que eso se ha
resuelto bien. Rodada en estudio y los exteriores en Malta.
Sorpresivamente el director introduce una coreografía, que inserta en ocasiones
inesperadas a lo largo del metraje, no carente de belleza, y de gran
expresividad; una de sus bailarinas no arriesga como el resto, se derrumba ante lo difícil. ¿El
sentido de la misma…? La vida obliga a la acción, a movimientos comprometidos y
peligrosos; la vida obliga a despojarse de prejuicios ideológicos para seguir
avanzando dentro de la cadencia grupal (desnudo coreográfico)… ¿Es una
alegoría sobre las dudas que viven los
personajes?… Y tal vez esto delata el compromiso del director. ¿Está con los
secuestradores…? No en vano la pretensión de los mismos es dar visibilidad al
problema del pueblo palestino, a ese problema de entonces que aún hoy pervive,
o a la pretensión de los alemanes que era la liberación de sus presos… Supongo
que la interpretación es subjetiva y cada espectador sacará su propia
conclusión.
Frases a destacar, del comandante con el secuestrador: (no
es textual)… La libertad es abrir el grifo y que salga agua; la libertad es
poder usar un inodoro… Un fontanero vale por diez terroristas, un ingeniero por
veinte…
En fin, como cine no
aporta nada nuevo y se ve con bastante desafección a pesar de que lo
narrado admite tensión y turbación. Queda
como un docudrama para enterarnos de un hecho sin más, como abrir una
página fríamente en una hemeroteca.
Título original:
Entebbe
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Reparto:
Rosamund Pike, Daniel Brühl, Eddie Marsan, Ben Schnetzer, Kamil Lemieszewski, Denis Menochet, Mark Ivanir, Natalie Stone, Andrea Deck, Vincent Riotta, Peter Sullivan, Lior Ashkenazi, Flynn Allen, Brontis Jodorowsky, Angel Bonanni, Noof McEwan, Ingrid Craigie, Yiftach Klein, Omar Berdouni, Uriel Emil,
David Annen, Frida Cauchi,
Laurel Lefkow, Daniel Ben
Zenou, Antonella Axisa, Jonathan Pyatt
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Año: 2018
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Duración: 107 min.
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País: Reino Unido Reino Unido
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Dirección: José Padilha
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Guion: Gregory Burke
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Música: Rodrigo Amarante
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Fotografía: Lula Carvalho
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Productora: Coproducción Reino Unido-Estados Unidos
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Género: Basado en hechos reales
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-MAY IBÁÑEZ-
Abril 2018
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